domingo, 10 de agosto de 2014

Relieves de Eusebi Arnau al alcance


Con la fantasmagórica foto de este extraño pajarraco de la Casa del Baró de Quadres con manos, brazos y piernas totalmente humanas, cierro este pequeño álbum dedicado a los relieves de Eusebi Arnau, el escultor del modernismo barcelonés.
También vimos la casa Lleó i Morera, pero sus leones alados y moreras -ahí parece que no le dejaron alas- quedaban demasiado altas para mi cámara.

 

Casa Quadres


Este relieve de la fachada de la Casa del Barón de Quadres podría ser, bien mirado, un antecedente y alegoría de una forma bélica muy actual. Situémonos en la posición -¿cuál otra?- de ese pobre dragón, al que parece que sus alas no le sirven de mucho. Pues bien. Una vez ahí nos caerá desde el cielo -¿de dónde, si no?- el zarpazo de un acorazado e impersonal, por mucho que se identifique con venga escudos, Sant Jordi. Dos mundos irreconciliables, da la impresión, separados por un aire pétreo.
 

sábado, 9 de agosto de 2014

Eusebi Arnau en l'Eixample

Ayer el descubrimiento posterior del terrado de la Casa Fuster, dominando todo el Paseo de Gracia, me compensó de la enorme frustración de un itinerario propuesto por el MUHBA que teóricamente iba a aclarar las trifulcas habidas en el momento del arranque del Ensanche barcelonés, y que se quedó en una plana, pobretona de conceptos y nada original visita exterior a unos pocos de los edificios más conocidos del modernismo de la ciudad. (La visita era “Raó, passió i negoci en la construcción de l’Eixample”, y ahora veo que hay una página web para escolares del mismo que, de llegarla a haber conocido con anterioridad, me habría hecho desistir del empeño y ahorrarme los 8,45 euros que pagué por ella).
Mirando las fotos hechas sobre un par de estos edificios tan conocidos, no obstante, veo que dan para un pequeño álbum Eusebi Arnau, el archiutilizado escultor. Como estábamos en la acera, con un punto de vista demasiado bajo, y como las ninfas de su Casa Lleó Morera ya se retiraron en la reforma que Loewe hizo en los años 40, sólo tengo fotos presentables de las casas Amatller y del Baró de Quadres.


En este relieve de la fachada de la casa del Barón de Quadres (Diagonal) sí que se ve claramente la lanza que Sant Jordi atravesando la garganta del pobre dragon.

Colgado de la puerta de la fachada modernista -la de la Diagonal- de la casa del barón de Quadres. 

viernes, 8 de agosto de 2014

Relieves de Eusebi Arnau al alcance


Casa Amatller. Como muy bien me ha chivado Joselu, le ha debido caer el palo con el que tocaba el pandero de hacer bailar al oso.
 

jueves, 7 de agosto de 2014

Casa Fuster


Me parece que se nota por aquí que me disgusta que Barcelona se esté convirtiendo en un monstruoso conjunto de plazas hoteleras. Pero ya el mal hecho, hay que aprovecharse como se pueda de lo que te puedan revertir los hoteles abiertos. Hoy he acabado bien el día, porque me han llevado a la terraza de la Casa Fuster, desde donde he hecho esta foto del Paseo de Gracia. Esto de las visiones inéditas que proporcionan los terrados me entusiasma.
Conviene ir en el momento en que esté el bar cerrado, porque es prohibitivo: Una caña y dos claras (ponen unas patatitas fritas y unas aceitunas o así), 24 euros.

 

Butikfarra


Volviendo anoche a cenar a casa (ya se acortan los días), me hizo gracia dar con esta nueva propuesta. No deja de ser una hamburguesería, pero pasada por el tamiz de lo autóctono (y dentro de lo autóctono catalán, la butifarra, y mucho más si es “amb seques”, reina). Vi que no había nadie. Quizás los autóctonos se han ido fuera, de vacaciones, y a los turistas que han mostrado la heroicidad de subir hasta ahí aún no les debe aparecer en sus guías, o les asusta lo que puede encontrarse detrás de esas butikfarras.
 

miércoles, 6 de agosto de 2014

El Cine Arenas


Hablando del cierre del Club Coliseum los diarios comentaban que ya sólo quedaban dos salas comerciales de cine en Barcelona con una sola pantalla. Una es el Maldà, que resiste en pleno casco antiguo de la ciudad con una oferta variada de cine de autor de reposición. El otro, cercano a la plaza España, es este cine Arenas, que muestra de forma ostentosa en su fachada su especialidad, siendo el tipo de cine que exhibe cosa secundaria.
 

martes, 5 de agosto de 2014

Todo a cien chinos


Este verano la proporción de comercios chinos en Barcelona habrá aumentado una barbaridad. No porque haya habido una gran inmigración inesperada, sino porque se mantienen abiertos, mientras que el universo “comercios” de la ciudad, con muchos cerrados por vacaciones, ha descendido.
Ahora empieza a ser significativa esa proporción en el sector hostelería, con la adquisición –siempre fajos de billetes en mano- de cantidad de bares tradicionales. Éste de la foto, no obstante, es del sector de actividad original, el “todo a cien”, las baratijas. Supongo que su contenido no llevará a enormes alegrías, pero debe decirse que, en mi opinión, se han esmerado con este reclamo tan bien puesto y de tanto colorido.

 

viernes, 1 de agosto de 2014

La cacharrería


Subiendo un poco más, también en Enric Granados se encuentra esta otra divertida tienda, una cacharrería, muy agradable. Es otra de esas a las que se les podría dar, desde las altas instancias municipales, un premio en forma de exención de impuestos o algo así. Lo tenemos chungo, no obstante: Es lo contrario de lo que en los departamentos municipales deben considerar "modelo Barcelona", a fomentar. 

Rosell


El casco antiguo de Barcelona ya casi ha sucumbido. La marabunta está subiendo de forma acelerada por la calle Enric Granados, ya repleta de terrazas de restaurantes. La mercería Rosell es una de las pocas supervivientes del viejo tejido comercial. No deben tener unas cuentas muy holgadas, pese a que somos clientes. Llegó a tener una sucursal, Rosell 2, unas manzanas más hacia Tarragona, que cerró hará un año, cuando murió el Sr. Rosell. Ahora supongo que el día menos pensado a la familia, ya concentrada en el local madre, les llegará alguien con un fajo de billetes y a partir de entonces se deberá ir a una tienda no familiar para comprar artículos de mercería. Apuesto a que en el cotizado chaflán aparecerá un bar que servirá comidas de moda.
 

La rambla del Raval

La rambla del Raval, el viernes por la tarde