Carteles del ayuntamiento

Al principio creí que era una más de esas tan frecuentes, dirigidas a no se sabe quién, que dicen “simpática e informalmente” que está muy mal eso de colarse en el metro, que demostremos nuestra urbanidad y demás consignas buenistas. Pero luego vi que no era del todo así, que parecen haber reflexionado y han llegado a entender que no es suficiente el apunte amable y gracioso. Se han atrevido, por lo menos, a esa nota adicional. Ahora a ver si hay fuerza y ánimo suficiente para aplicar la amenaza. Y lo ampliaría de los meados a los cagarros, que también se llegan a ver hacer a profusión en medio de la calle.